Este laboratorio de oportunidades desnuda un sistema desigual en el acceso a la cultura. Más bien, evidenciaba la praxis pedagógica formal basada en objetivos de meritocracia que no pueden satisfacer a una parte importante de la población debido, sobre todo, a elementos ambientales que contribuyen a la desestructuración y la marginalidad. por lo tanto a malos hábitos y una insana convivencia con la sociedad.
Pero la creatividad es una forma de articular la educación que va más allá de calificaciones. El arte debe ser parte importante en el desarrollo del individuo en todas las etapas de su vida. Crear sujetos capaces de poseer un pensamiento analítico y subjetivo; ser capaces de resolver conflictos de manera creativa, es proponer soluciones varias y por lo tanto desarrollar habilidades para gestionar con responsabilidad cada paso y decisión en la vida. por lo tanto los guías o pedagogos, sea cual sea la materia de aprendizaje, deben poseer las herramientas necesarias para transmitir el conocimiento a través de métodos creativos y estimulantes para los jóvenes. Esto sólo se consigue si los responsables políticos abren sus horizontes y entienden que una sociedad igualitaria no es sólo igualdad en términos socioeconómicos sino la capacidad de extraer en cada ciudadano un modelo de autoconocimiento y crítico. Una posibilidad de entender que el arte no es un producto elitista y segregado para unos privilegiados. El arte es un juego que ayuda a aprehender del otro y un espejo en el que despojarnos de las pieles que nos impiden crecer. La creatividad es un bien del ser humano desde antes de la historia que nos hizo entender nuestro lugar en el mundo.